jueves, 1 de noviembre de 2012

Día 6: Here They Come

Al final conseguí salir del campo de asteroides sin ningún rasguño. La velocidad de éstos era bastante baja, seguramente habrían formado parte de un cargamento de minerales que trasportaría algún trailer espacial o algo por el estilo. Si hubiesen sido fruto de una colisión o explosión irían demasiado rápido y resultaría muy peligroso pasear junto a ellos escuchando a Bach.

Nada mas salir allí estaban ellos. No se quienes era pero de nuevo el ordenador de abordo...

"TE TIENEN FIJADO EN SU PUNTO DE MIRA"

No sabía que hacer... ¿o sí lo sabía? (dale ya al play)

El ordenador dijo:

TíTULO:HERE THEY COME
TIPO: BANDA SONORA, STAR WARS.
AÑO:1977

Mi mano se fue automáticamente a una serie de botones, switchers y por fin agarré la palanca de mando con fuerza.

Aunque el vacío del espacio me impedía escuchar el sonido de sus motores me imaginé que estarían en un ralentí nervioso, casi al rojo vivo y con la mano temblando encima de la palanca de potencia. Y allí que yo apreté la mía.

Transmisión de radio: "Te tenemos Frank. Por fin nos devolverás lo que es nuestro"

¿Qué querían esta gente? Daba igual por ahora, no era tiempo de pensar. (Ah, y descubrí que mi nombre era Frank).

¡Al ataque!

La nave salio dispara hacia ellos, no sin antes mandar dos misiles de de aviso. Uno hizo impacto en una de ellas. Solo me quedaban dos.

Conseguí pasar entre ellas a una velocidad espectacular. Aunque mi nave era más rápida que la de ellos, esas estaban mejor armadas. Como dije pasé entre ellas haciendo un arco de abajo hacia arriba para poder tenerlos a tiro. En esos momentos aprovecharon para lanzar ráfagas de rayos. No me dio ni uno.

Al terminar mi giro de casi 180º los tuve en el punto de mira por unos segundos. Misil 1 y 2. 

"IMPACTO EL 1"

Me quedaba la más grande de las 3. Pero supe que no iba a ser ningún inconveniente. Solamente tuve que observar como mi cuerpo trabajaba solo. Acababa de despertar hace unos pocos días en medio de la nada y ahora descubría que era capaz de hacer todo esto. Tenía que recordar rápido o posiblemente estos "reflejos" terminaría por desaparecer.

Mierda, creía que los tenía. Aceleré al máximo. Menuda carrera. 
Me puse justo detrás, estaba a menos de 100 metros de distancia. Suficiente. 
A esta distancia sería inútil lanzar un misil teledirigido. Era una distancia demasiado corta y se perdería. Así que me concentré, agarre la palanca para el disparo manual.

El contador de energía referente a los rayos de protones comenzó a bajar tan rápido como salía por las toberas. 1000, 999, 998,...

950,...

"NAVE DESTRUIDA"

YEEeeeeyeyyeHAhaa!!!!!!


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